El avance más dramático y contundente de la Reforma en el siglo XVIII se llevó a cabo en Alemania. Según la providencia de Dios, la tierra estaba perfectamente preparada para estallar con el fruto del cambio. El pueblo alemán estaba cansado de dar a la iglesia solo para que Roma le quitara su dinero. Estaban ofendidos por el estilo de vida malvado de muchos sacerdotes y monjes. El gobierno semiautónomo que disfruta los príncipes alemanes dio lugar a un nuevo espíritu nacionalista y allanó el camino para la protección política de aquellos que harían el trabajo de reforma. Como en el primer siglo, había llegado la plenitud del tiempo. La Palabra de Dios debía ser descartada una vez más y el mundo era presenciar un renacimiento del cristianismo bíblico.
En su corazón, la Reforma era un movimiento evangélico. Comenzó con las buenas noticias de Cristo trabajando efectivamente en los corazones de los individuos para la salvación. Fue el resultado de la “piedad y oración” (D’Aubigne 1846, 146). Si bien la política y el progreso intelectual fueron factores clave, no fue simplemente un movimiento político o intelectual. A medida que observamos varios aspectos de la Reforma alemana, ¡es importante recordar en su núcleo la reforma fue el resultado de que los hombres y mujeres nacen de nuevo por la gracia del Dios Todopoderoso!
La historia completa requiere muchos volúmenes. El alcance de este documento será presentar algunos aspectos destacados de dos categorías de interés en este período: personas importantes en la Reforma alemana y eventos importantes en la Reforma Alemana.
personas importantes en La Reforma alemana
es ciertamente demasiado simplista forzar a las personas a definiciones categóricas. Sin embargo, es útil presentar a los principales actores en la reforma alemana por categoría para que podamos comprender rápidamente quién estuvo involucrado. Aquí consideraremos cinco categorías: humanistas, compañeros evangélicos, príncipes evangélicos, iglesias romanistas y príncipes romanistas.
Los humanistas
no debemos subestimar el Importancia de los eruditos humanistas que trabajaban y escribían en los siglos 15 th y 16
th . Dios usó el mayor interés en el aprendizaje y particularmente en la antigüedad para crear un clima listo para transformar la cristiandad. El “líder reconocido, respetado por muchos como el ‘Príncipe de los Humanistas’, era Erasmus de Rotterdam” (González, 1985, 10). Su papel en la Reforma se debate porque adoptó un enfoque de “medio del camino”. Tanto los reformadores como los miembros de la iglesia establecida querían llevar a Erasmus a sus campamentos. Al final de su vida, había decepcionado a ambas partes, aunque escribió decididamente contra Lutero en la libertad de la voluntad. cultivado a través del trabajo de su vida. Estas cosas se convirtieron en herramientas en las manos de Dios para la reforma de la Iglesia.
Los iglesias evangélicas
indudablemente, Martin Luther (1483-1546) es uno de Las figuras más significativas en la historia del mundo. La mayoría de las historias usan la publicación de sus 95 tesis como la fecha de inicio de la Reforma. Su influencia en la historia de la iglesia no tiene rival desde la época de los apóstoles. También es un campeón del pueblo alemán; cuyos muchos escritos (especialmente su traducción de la Biblia) les dieron su lenguaje moderno.
Lutero nació en circunstancias humildes, pero su padre era un ejemplo de la clase media en ascenso que factorizaría en gran medida en la transformación de Sociedad Europea. El anciano Luther se convirtió en minero y luego es propietario de varias fábricas. Quería que su hijo recibiera una buena ley de educación y estudio. Lutero creció bajo un régimen de estricta disciplina a manos de sus padres y maestros. Asistió a la Universidad de Erfurt, donde tomó el soltero y el maestro o los títulos de artes. Sin embargo, sorprendió a su familia y amigos al unirse de repente al monasterio agustiniano en Erfurt.
La motivación de Lutero para convertirse en monje es debatida por algunos escritores. Sin embargo, es cierto que temía el juicio de Dios y estaba buscando una forma de garantizar la paz para su alma (Bainton, 1964, 237). Se arrojó a la vida monástica. Era un monje modelo, observando regularmente oraciones, misa, sus deberes y confesión. Sin embargo, no encontró paz en ninguna de estas cosas. Tenía mucho miedo al juicio de Dios. Por recomendación de su superior, se convirtió en sacerdote y luego fue enviado a enseñar teología en la recién formada Universidad de Wittenberg.
como parte de su viaje espiritual, comenzando en sus días en el monasterio en Erfurt y culminando En su estudio de romanos en Wittenberg, Lutero comenzó a buscar refugio en Cristo. Le habían enseñado a creer “la justicia de Dios revelada” en los romanos 1:17 referidos a la ira de Dios, que se vería sobre los pecadores. Sin embargo, mientras estudiaba el texto, Lutero determinó que la “justicia de Dios” es lo que se le da a los que tienen fe. Esta doctrina de justificación por fe solo se convirtió en la plataforma principal del ministerio de Lutero, la escritura y la vida. Lutero dice: “Sentí que había nacido de nuevo y que las puertas del cielo habían sido abiertas. Toda la Escritura obtuvo un nuevo significado. Y desde ese punto en la frase ‘la justicia de Dios’ ya no me llenó de odio, pero más bien se volvió indescriptiblemente dulce en virtud de un gran amor “(González, 1985, 19-20).
Cuando el dominicano John Tetzel ingresó a Alemania vendiendo indulgencias, Luther publicó 95 declaraciones en respuesta a este comercio considerado engañoso y peligroso. Colgó sus tesis en las puertas de la Iglesia del Castillo en Wittenberg en la víspera de toda Santa, 1517. La respuesta fue más allá de todo lo que Lutero esperaba. Las tesis se imprimieron y se extendieron por Alemania como un incendio forestal. De hecho, se había iniciado un incendio, pero era el fuego de la reforma para la iglesia y la expansión del evangelio de Jesucristo.
Lutero comenzó a escribir en defensa de sus tesis y también produjo obras de teología, Comentarios y libros devocionales. Su oposición a la iglesia establecida hizo enemigos poderosos, pero el Elector de Sajonia lo protegió. En abril de 1521 fue tomado ante el emperador Charles the V y la dieta de los gusanos. Cuando se le ordenó retractarse de sus escritos, dio esta famosa respuesta:
“a menos que esté convencido por el testimonio de las Escrituras o por una razón clara (porque no confío ni en el Papa ni en los consejos Solo, ya que es bien sabido que a menudo se han errado y contradicho a sí mismos), estoy obligado por las escrituras que he citado y mi conciencia está cautiva para la Palabra de Dios. No puedo y no me retraeré nada, ya que no es ni seguro ni derecho a ir en contra de la conciencia “(Noll, 1997, 154).
Con estas palabras, el mensaje de la Reforma había llegado desde la celda de un oscuro monje hasta el pináculo del poder mundial
Lutero no fue el único hombre de la iglesia alemán involucrado en el trabajo de reforma. Sus colegas de la Universidad de Wittenberg fueron algunos de sus partidarios más efectivos. Quizás la persona más cercana a Lutero fue el brillante Philip Melanchthon (1497-1560). Aunque nunca fue un sacerdote ordenado, su influencia en la iglesia en Alemania solo es superada por la de Lutero. Si bien no tenía el atractivo popular y el talento de su amigo mayor, su aprendizaje clásico y su mente sistemática era perfectamente adecuada para que se convirtiera en el organizador principal del sistema teológico luterano.
Escribió el primer trabajo protestante de teología sistemática, loci comunica teológica o lugares comunes teológicos . Melanchthon sirvió como representante de todo el protestantismo alemán cuando escribió la confesión de Augsburg. En sus intentos de encontrar una resolución al peligroso conflicto que se estaba gestando entre los príncipes católicos y reformados de Alemania, la confesión era más moderada de lo que sería si Lutero hubiera escrito el trabajo. Esto llevó a algunos a decir que Melanchthon debilitó el sistema luterano de teología (Schaff, 1910, 702). Sin embargo, su contribución como maestro, escritor, miembro de la iglesia y hombre de la familia cristiano son abrumadoramente positivos.
mientras todavía era un monje en Erfurt, Luther entró en contacto con Johann Von Staupitz. Staupitz fue el vicario general de la Orden Augustiniana. Staupitz alentó a Lutero a convertirse en sacerdote y luego enseñar en la Universidad de Wittenberg. Aunque el apoyo de Staupitz a la Reforma era solo marginal, Luther afirmó: “Si no hubiera sido por el Dr. Staupitz, debería haberme hundido en el infierno” (Posset, 2003, 4).
otro de Luther’s Los colegas de Wittenberg fueron Andreas Carlstadt (1486-1541). Fue Carlstadt quien le otorgó a Martin Luther el título de Doctor en Divinidad. Influenciado por Luther, Carlstadt fue llevado a la visión reformada. Los dos debatieron al Dr. Eck juntos en la disputa de Leipzig. Sin embargo, Carlstadt adoptó algunas opiniones radicales que fueron una desviación de las convicciones bíblicas que animaron a Lutero. Cuando Lutero regresó del exilio en el Wartburg, se opuso suavemente a la agenda que Carlstadt había implementado durante su ausencia. Más tarde, Carlstadt salió de Wittenberg y se instaló como pastor en Orlamunde. Allí continuó su reforma radical, incluyendo un rechazo o íconos, bautismo infantil, títulos, música de la iglesia y la verdadera presencia de Cristo en la comunión. Luther se opuso a Carlstadt abiertamente y el último finalmente se vio obligado a salir de Alemania.
Una figura final que debería mencionarse aquí es George Spalatin (1484-1545). Spalatin sirvió como Capellán y Secretario del Príncipe Fredrick, el sabio de Sajonia. Un ex compañero de clase de Lutero en Erfurt, era un hombre de inclinación evangélica que luego se involucró más en el trabajo de la Reforma. La spalatina fue el principal vínculo para las comunicaciones entre Lutero y el Elector y llevó a cabo una voluminosa correspondencia con el Gran Reformador. Estas cartas son particularmente útiles para nosotros al tratar de comprender la relación entre Lutero y su Príncipe (Schaff, 1910, 94).
Príncipes evangélicos
justo Como la fe cristiana no es solo para el clero, el trabajo de la Reforma fue llevado a cabo por pastores y académicos bíblicos. Dios usó un puñado de poderosos príncipes alemanes para avanzar en el evangelio de Cristo en el 16
th siglo.
Entre estos príncipes fue el elector Fredrick de Sajonia (1463-1525 ). Sus esfuerzos exitosos para gobernar su territorio con justicia y prudencia le valieron el apodo de Fredrick el sabio. Era un hijo piadoso de la iglesia que participó en todo el ritual religioso de su época y acumuló una gran colección de reliquias cristianas. Fue el fundador de la Universidad de Wittenberg y su principal benefactor cuando Lutero vino a enseñar allí. Nunca salió y se puso del lado directamente con la Reforma, pero como una cuestión de principio defendió a Lutero y el trabajo que estaba teniendo lugar en Sajonia. Además, estaba disgustado con la vida de los sacerdotes y los abusos de la iglesia. Los historiadores ven una fe infantil en Fredrick que continuó creciendo. Justo antes de su muerte, Fredrick cambió su voluntad. En el nuevo documento que declaró que estaba “redimido por la preciosa sangre de su amado Salvador” (D’Aubigne, 1846, 386).
sobre la muerte de Fredrick, su hermano Duque John lo sucedió como elector de Sajonia (1468-1532). John, cuyo apodo era “la constante”, era más audaz que su hermano mayor. Él decidió apoyar la causa de la Reforma, incluso si le costó todo. Durante su reinado se estableció oficialmente la Iglesia Luterana. Jugó un papel importante en la dieta de Speyer y la dieta de Augsburgo. Al final de estas reuniones, se le advirtió que podía perder su electorado debido a su posición protestante, el duque John respondió: “Haré lo correcto sin preocuparse por mi dignidad electoral. Confesaré a mi Señor, cuya cruce lo estima más que Todo el poder en la tierra “(Schaff, 1910, 700).
Quizás la figura política más audaz en la historia de la Reforma Alemana es Philip, el Landgrave de Hesse (1504-1567). El joven Philip conoció a Martin Luther en la dieta de los gusanos en 1521. Más tarde se conoció y correspondió con Melanchthon y se convirtió en un protestante firme. Intentó sin éxito servir como un constructor de puentes entre los reformadores alemanes y suizos y trabajó para desarrollar la Liga Schmalkaldic de los Estados protestantes, que luego fueron derrotados por Charles V. Su celosa vida religiosa fue marcada por problemas personales como la adulterio y la bigamia. /P>
Los iglesias romanistas
El hombre que el Señor solía catapultar inadvertidamente a Martin Luther a la fama mundial estaba en John Tetzel (1465-1519). Tetzel era un monje dominicano contratado por el arzobispo Albert para vender indulgencias en Alemania. Su predicación inadecuada de la justificación llevó a Lutero a escribir sus 95 tesis . El mensaje de Tetzel se resumió en una línea atribuida a él: “Tan pronto como la moneda en los anillos de cofre, el alma de Purgatory Springs” (González, 1985, 21).
Dr. Johann Eck (1486 -1543) demostró ser un desafío más formidable contra Lutero que Tetzel. Debatió a Luther y Carlstadt en la disputa de Leipzig (1519). Aunque él y Luther se habían considerado una vez como amigos, Eck estaba decidido a triunfar humillando al reformador en debate. No fue realmente capaz de hacerlo, pero hizo con éxito la enseñanza de Lutero a la de John Hus (Bainton, 1964, 245). Esto fue dañino y provocó que muchos declararan a Eck el ganador de la disputa.
Pope Leo X (1475-1521) se sentó en el trono en Roma en el momento de la Reforma. Aprobó la venta de indulgencias que condujeron al trabajo de Tetzel en Alemania y se decepcionó mucho ver que las ventas cayeran como resultado de la predicación de Lutero. Aunque trató de ignorar la situación al principio, Leo finalmente emitió un toro papal excomulicante de Lutero. Por lo tanto, en realidad fue la iglesia romana la que causó la división entre católicos y protestantes.
Príncipes romanistas
No podemos olvidar que los papas medievales también eran príncipes como iglesias. A lo largo de la vida de Lutero hubo cuatro papas diferentes: Leo X, Adrian VI, Clement VII y Pablo III. Cada uno de estos hombres se centró (aunque algunos a menos grados) en aumentar el poder temporal del papado a través de la intriga política y, a veces, las guerras.
El príncipe católico más poderoso durante el período de Reforma alemana fue Charles V (1500- 1558). Charles ya tenía muchos títulos cuando fue elegido para servir como Sacro Emperador Romano en 1519 y comenzó a gobernar sobre un gran imperio. Charles era un político más que cualquier otra cosa y toleró a los luteranos cuando funcionó para su ventaja. Sin embargo, él era un católico fuerte y habría suprimido la Reforma con fuerza desde el principio si fuera posible. “Este hombre (Lutero) nunca me hará un hereje”, anunció (Schaff, 1910, 306). Sin embargo, Charles fue controlado por la influencia política de los príncipes alemanes y su necesidad de formar alianzas con ellos en la guerra contra los turcos, los franceses y el Papa Clemente. Charles finalmente declaró la guerra contra la Liga Schmalkaldic de Príncipes Luteranos y los derrotó en la Batalla de Muhleberg en 1547.
Eventos importantes en la Reforma alemana
Como se mencionó anteriormente, es imposible en un breve documento abordar todos los eventos significativos en la Reforma alemana. Aquí se enumeran solo unos pocos: la publicación de las 95 tesis , la dieta de los gusanos, el encarcelamiento de Lutero en el Wartburg, la guerra de los campesinos, la dieta de Speyer y la dieta de Augsburgo. P>
Las 95 tesis
Martin Luther no fue la primera persona en protestar contra los abusos de la Iglesia Católica Medieval ni fue el primero en señalar la naturaleza ridícula de las indulgencias. Sin embargo, la situación política en Alemania, la creciente clase media de personas alfabetizadas, el uso de la nueva imprenta y el crecimiento espiritual de Lutero combinado para establecer el mundo en un curso inesperado. Las tesis publicadas por Luther el 31 de octubre de 1517 pronto se distribuyeron en toda Europa.
En sus tesis, Luther protestó contra el comportamiento de los vendedores de indulgencia. Tiene cuidado de no condenar al propio Papa y parece creer que el Papa no podría ser consciente de los abusos llevados a cabo en su nombre. Sin embargo, declara: “El verdadero Tesoro de la Iglesia es el Santo Evangelio de la Gloria y la Gracia de Dios” (Tesis 62). “Además, deja en claro que el Papa no puede remitir ningún pecado, excepto al declarar la remisión de Dios. El perdón presupone el verdadero arrepentimiento, y solo se puede encontrar en los méritos de Cristo” (Schaff, 1910, 159). La presentación de Luther del verdadero evangelio vacía el papado de su poder para coaccionar y recolectar a través de la oferta de remisión de los pecados.
La dieta de los gusanos
Lutherher fue convocado a la dieta imperial que tuvo lugar en la ciudad de los gusanos en 1521. Allí estaba al retractarse de su escritura y enseñanza. Su viaje a los gusanos era arriesgado. Aunque el emperador le prometió una conducta segura que todos recordaban la quema de John Hus en el Consejo de Constance a pesar de la conducta segura que le habían dado. Lutero fue de todos modos, confiando en que Dios podría protegerlo si lo desea, pero también dispuesto a morir por la verdad del Evangelio. “Incluso si hay tantos demonios en los gusanos como mosaicos en las casas, todavía entraría en él”, dijo (D’Aubigne, 1846, 238).
Las famosas palabras de Luther ante el emperador Charles se registran arriba. Aunque hubo mucho debate sobre qué hacer con Lutero, sus enemigos finalmente produjeron un edicto, que fue firmado por el propio Emperador. Este edicto de gusanos dio fuerza legal al toro papal contra Lutero. Lo denuncia como un demonio y le pronuncia la prohibición del imperio. Ordena la quema de sus libros y prohíbe el refugio de su persona. Él y todos sus seguidores debían ser entregados al Emperador para que pudieran ser castigados de acuerdo con las leyes del Imperio (Schaff, 1910, 319). Afortunadamente, la situación política en Europa haría imposible que el edicto se aplique en Sajonia donde vivía Lutero. 10 días y comenzó su viaje de regreso a Wittenberg. En el camino fue secuestrado por un grupo de hombres armados. Lutero fue llevado solo al Castillo Wartburg. Este acuerdo se había hecho a pedido del Príncipe Fredrick, que quería robar a su ciudadano más famoso a un lugar seguro antes de que uno de sus enemigos pudiera atraparlo.
Lutero no perdió el tiempo durante su retiro en El Wartburg. Escribió extensamente. Su logro más notable fue la traducción del Nuevo Testamento al alemán. Esta fue la primera entrega en una obra que abarcaría muchos años y culminaría en la traducción de toda la Biblia. De todas las grandes cosas que el Señor hizo a través de Lutero, esta es quizás la más significativa. Philip Schaff expresa la importancia de este trabajo bien diciendo: “La Biblia dejó de ser un libro extranjero en una lengua extranjera y se naturalizó, y por lo tanto, mucho más clara y querida para la gente común. En adelante, la Reforma ya no dependía de las obras de los reformadores, pero en el Libro de Dios “(1910, 341).
La guerra de los campesinos
las historias políticas y religiosas del 16º El siglo está inseparablemente entrelazado. Esto se ve claramente en la guerra de los campesinos (1523-1525). Había habido levantamientos antes de la reforma debido al mal tratamiento que muchas de las personas comunes recibieron de sus amos y príncipes. Sin embargo, en el momento de la Reforma, los campesinos “identificaron su causa con la restauración del cristianismo puro” (Schaff, 1910, 442).
Lutero reconoció que algunas de las quejas de los campesinos eran legítimas y alentó a los príncipes a hacer concesiones. Sin embargo, cuando se hizo evidente que muchos de los campesinos estaban siendo llevados a una rebelión abierta y reclamaban la bendición de Lutero y los derechos del evangelio como su razón, el reformador tomó su pluma y escribió contra ellos. Aconsejó a los príncipes que “apuñalara, mataran y estrangularan” (Schaff, 1910, 446). Según su consejo, Philip de Hesse, el duque Henry de Brunswick, el Elector John, y Dukes George y John de Saxony aplastaron a los ejércitos campesinos sin piedad. El número de los asesinados fue mayor de 100,000. Este evento dejó una cicatriz profunda en Alemania y en Lutero.
La dieta de Speyer
En 1529, la dieta del imperio se convocó en la ciudad de Speyer. El emperador Charles V decidió avanzar en su agenda política al reafirmar el edicto de los gusanos, que había sido moderado por la primera dieta de Speyer en 1526. En la dieta, el hermano del emperador Ferdinand anunció que Charles ya no toleraría ninguna desviación de la decisión de Los gusanos y todos debían cumplir de inmediato. La mayoría de la asistencia aceptó fácilmente la decisión.
Los príncipes luteranos, sin embargo, no podían obedecer tal comando. Seis de ellos, junto con representantes de 14 de las ciudades libres de Alemania, firmaron una famosa protesta en la que expresaron su creencia de que no necesitan obedecer al emperador en asuntos de religión y conciencia. De esta famosa protesta, a los cristianos evangélicos se les dio el nombre de “protestante” (D.Aubigne, 1846, 520).
La confesión de Augsburg
aunque Las luchas de la Reforma más allá de 1530 incluirían la guerra y muchas otras dificultades, no hay duda de que la confesión de Augsburg fue un punto culminante en su progreso. El emperador Charles V invitó a la dieta imperial a reunirse en Augsburgo en abril de 1530. Su propósito declarado era resolver la cuestión religiosa y prepararse para la guerra contra los turcos (Schaff, 1910, 696). El lenguaje educado, sin embargo, ocultó los problemas que se preparan debajo de la superficie. La mayoría romana tenía la intención de destruir a la minoría protestante. Los protestantes no ignoraron esto, por lo que la dieta comenzó con la tensión universal.
Un problema temprano fue que los predicadores luteranos que habían acompañado a sus príncipes estaban ocupados entregando mensajes evangélicos en toda la ciudad. Esto trajo una fuerte reacción del Partido Romanista. Cuando el emperador prohibió la predicación, el Margrave George de Brandenburg habló por todos los protestantes diciéndole al emperador que preferiría perder la cabeza y luego negar a Dios (Schaff, 1910, 698).
Aunque era moderado y cortesano En su tratamiento de los luteranos, el emperador continuó apoyando el edicto de los gusanos. Era el objetivo de los protestantes hacer una declaración de fe antes de la dieta, lo que glorificaría el evangelio de Dios y también dejaría descansar las falsas acusaciones de sus enemigos. A lo largo de la conferencia, Philip Melanchthon estaba trabajando para redactar una declaración que traería cierta unidad entre el grupo romano y los luteranos, al mismo tiempo que resumía las verdaderas creencias de los protestantes. Esto demostró ser una tarea imposible. Los iglesias romanas no se comprometerían a nada. Este triste estado de cosas, sin embargo, fortaleció la declaración final, que fue firmada por los príncipes y leía al Emperador el 25 de junio de 1530. La mayoría romana rechazó la confesión, pero los protestantes estaban llenos de alegría al escucharlo. <
La confesión de Augsburg, como se le leyó al emperador Charles, consistió en dos grandes divisiones. La primera fue una declaración de creencia doctrinal en poder de los protestantes y el segundo fue un rechazo de los abusos hechos por la Iglesia Romana. Es la “primera y más famosa de las confesiones evangélicas” (Schaff, 1910, 707) y se ha convertido en la declaración oficial de fe para la Iglesia Luterana. Resumió la doctrina de la Reforma y creó una base sólida sobre la cual la Iglesia podría crecer en los siglos a seguir.
Conclusión
La Reforma de los 16 th Century fue un evento mundial. No se puede atribuir a Martin Luther solo o al trabajo combinado de los reformadores alemanes. Era la obra de Dios. Un trabajo que hizo en Francia, Suiza y muchas otras naciones también. Un trabajo que continúa en todo el mundo hoy. ¡Que nunca deje de crecer y que obtenga toda la gloria!
obras citadas
Bainton, Roland H .. cristianismo . Boston: Houghton Mifflin, 1964.
d’Aubigne, J.H. Mirlo. Historia de la Reforma del siglo XVI . Traducido por H. White. Londres: Religious Tract Society, 1846.
González, Justo L. La historia del cristianismo . Volumen 2, La Reforma de la actualidad . San Francisco: Harper Collins, 1985.
Noll, Mark A. Puntos de inflexión: momentos decisivos en la historia del cristianismo . Grand Rapids, Michigan: Baker Books, 1997.
Posset, Frank. El líder de la Reforma Católica: la vida y las obras de Johann von Staupitz . Surrey, Gran Bretaña: Ashgate, 2003.
Schaff, Philip. Historia de la Iglesia Cristiana . Volumen 7, Cristianismo moderno: la Reforma alemana . Grand Rapids, Michigan: Eerdmans Publishing Company, 1910.
